En las habitaciones del pasado.

Y cuanto hubiese deseado encerrarnos en aquella habitación, no haber salido de allí, abandonarnos al amor, a las ganas de no soltarte nunca, de tenerte cerca, de soñar contigo... Y cuanto hubiese deseado quedarme allí sintiendo tu mirada en la mía. Pero cerramos la puerta y dejamos todo dentro, pero nosotras quedamos fuera. Y hoy no nos queda nada. 
Y cuanto hubiese deseado...