25 enero, 2022

La diferencia entre caer y volar es hacerlo sobre tus manos

Desde que me sonríes todas las canciones de amor llevan tu nombre. 
Desde que tu risa invade cada hueco de mi vida todos los poemas te describen. 
Desde que tus ojos me miran protagonizas todas las películas. 
Desde que encajas, a la perfección, tu mano en la mía, todo el amor, lleva tu nombre. 

Desde el primer momento, no preguntes como, pero lo supe, no en ese momento, pero algo dentro de mí sí que lo sabía. 
Que tú, de entre todas las personas que se cruzan a lo largo de una vida ibas a ser quien la cambiaría. 
Que desde entonces la felicidad llevaría tu nombre tatuado, que el camino sería de tu mano, y que cada alegría sería mayor contigo, y cada tropiezo sería menos doloroso contigo. 

Y parece que tenía la razón, que cada beso sabría mejor que el anterior. 
Que cada abrazo es como mi casa, mi lugar seguro. 

Y, no lo sabia entonces, pero si lo sé ahora, que todos lo sueños que tenemos se irán construyendo, poco a poco, paso a paso, de la mano. 
Quiero todos los segundos de la vida contigo.
Quiero todos los momentos, las risas y las lagrimas. 
Quiero cada centímetro perfectamente imperfecto de ti. 

Te quiero, en todas tus formas, de todas las maneras.

31 marzo, 2020

Lo esencial es invisible para los ojos, así que te presto los míos un rato


Me diste la mano y me enseñaste todas tus grietas y tus ruinas, me abriste la puerta, y yo entré paso a paso.

Me hablaste de cada una de ellas y de lo que te había costado arreglar y tapar cada una. Como si hubiera algo que ocultar, pero allí donde tú no pudiste, yo vi flores crecer de entre los huecos.

Mientras te vi reír, y llorar, me senté contigo en tu jardín.  Y quise volver cada día y regar las flores que crecían, para que construyas un bosque y no un jardín en ruinas. Y quise besar cada una de tus heridas, y recorrer cada una de tus cicatrices.

Y te vi luchar, y te vi caer, pero también te vi levantarte una vez más, y cuando tú no recuerdes todo el camino que has recorrido, cuando pienses que no ha valido la pena, cuando pienses que no vales, que no tienes nada más, pienso repetírtelo hasta que te lo creas. Una, y otra vez.

Pienso buscar mil palabras que te lo hagan entender.

Que eres de esas personas que antes de dar los buenos días ya has hecho que lo sean.
Que eres una luchadora, cabezota, que pelea por lo que se propone.
Que eres especial, y no creértelo te hace más especial aún.
Qué peleas por los tuyos.
Qué eres leal, y siempre estas ahí. Pase lo que pase, como el faro en medio de la tempestad.
Que cuando pienses que eres todo caos, no olvides que prefiero tus tormentas a cualquier cielo despejado.
Que hay tanto bueno dentro de ti que me sorprende que no te deslumbres con tu luz.


En Japón tienen una palabra para la belleza de la imperfección “Wabi-sabi”, y cuando algo se rompe no lo tiran, le hacen un “Kintsugi”, lo reparan con oro.


Y tú creyéndote rota, y yo viéndote brillar, como el oro.

20 marzo, 2020

Seguir sumando

Entre tú y yo hay dos buses.
Dos ciudades.
30 kilómetros.
25 minutos en coche.
1 hora y cuarto en autobús.

Y te llamo, y escucho tu voz, y te siento cerca.
Y apunto el numero de besos que caben entre nosotras.
El número de caricias.
El número de bromas.
El número de orgasmos.
El número de paseos.
El número de masajes.
El número de risas.
El número de conversaciones.
El número de cosquillas.

Y contigo nunca me salen las cuentas porque siempre nos caben más.

09 octubre, 2019

Y entonces aparecerá alguien en tu vida que encienda las luces que otros apagaron

Ven, pasa, perdón si ves que está un poco desordenado todo.

Verás que hay cosas sin terminar, habitaciones que no pegan unas con otras, pero soy toda contradicción.

En esas cajas sin ordenar hay valores, y pensamientos que aún no se donde colocar, algunos se quedarán aquí, otros no.

Si te quedas podemos crecer juntas, decidir de qué color podemos pintar las habitaciones vacías, si me preguntas, mi color favorito es del de tu risa.

Hay enchufes que no funcionan, bombillas fundidas, y ventanas que no se usan hace tiempo.

A veces se me ponen los ojos tristes, se me hace grande y las paredes me agobian, pero desde que entraste tú el aire me parece menos denso, y suena música por los rincones, me miras y una luz se enciende en mi pecho, como un faro en la niebla.

Te prometo que no me conformo ni un solo día, que no doy por hecho, que cada día sea especial. Y el día que tus ojos sean los que estén tristes voy a estar ahí, para darte la mano y cuidarte.

Hay que hacer reforma, pero si tu quieres le robamos el reloj al tiempo y tiramos tabiques, y construimos un ático, ladrillo a ladrillo, con vistas, al futuro.

Podemos pintar el dormitorio de besos y caricias. Llenar la cocina de olor a café y de desayunos de domingo. En el salón podemos colocar todas las películas que hayamos visto, o las que vimos sin ver, y todas las que vayan a ser mis favoritas si las veo entre tus brazos.

En el pasillo colgar todas las fotos que te vaya a hacer, todos los recuerdos nuevos.

Y llenar la nevera con imanes de los lugares a los que iremos, y llenar el pasillo de arena de las playas que nos vean de la mano.


Ven, pasa, quiero que te sientas cómoda en mi vida, como si estuvieras en casa.

02 octubre, 2019

Y me declaro culpable de no evitar lo inevitable

Guardo cada uno de tus besos y miradas bajo llave como cuadros colgados en mi pared, para poder volver a mirarlos siempre. 
Guardo cada risa, tuya y mía.
Simplemente siendo tu, sin disfraces, sin escondites haces que a mi cara se le olvide cualquier cosa que no sea sonreír, que no sea sonreírte. 
Quiero ir despacio, dar cada paso del camino, juntas, de la mano, sin ninguna prisa, por que el destino me da igual si tu estas allí.
Quiero contarte cada una de mis rarezas, que me sonrías y se conviertan en algo especial.
Que beses cada una de mis grietas, y que yo bese las tuyas. Que cada fallo en mi sistema se arregle solo con tu luz.

Contigo soy feliz.
Contigo puedo ser.
Conmigo puedes ser.

Conmigo y contigo, podemos ser.






(Escucho tu silencio.
 Oigo constelaciones: existes. 
                      Creo en ti.
                                     Eres.
                                              Me basta).